lunes, 3 de agosto de 2009

La quema de la alcaldía...¿Novela?


Libro escrito por Luis Enrique Arce

He considerado siempre que el buen lector, es como un tractor de oruga y abre trocha por donde sea, siempre viendo lo bueno y lo malo, de los libros que llegan a nuestras manos; en este caso, una (ex) buena amiga, excelente critica literaria mía y de otros, tuvo la inefable idea de regalarme este libro, y a mi no me va quedar otro remedio que invitarla a tomar café, y entre una conversadita sobre amores y desengaños, preguntarle, ¿Qué es la vara, a ver, yo que le hice para que me saliera con esto?
Claro que la católica, romana y apostólica amiguita esa, bautizada en el tenor de mi rabia como La Traidora, nombre de novela de veras, huyó del país, disque con fines de trabajo apenas supo que iba a empezar la lectura, y me niego rotundamente a decirle por Internet, o teléfono lo que opino, así que, va por escrito.
Este arroz con mango, según su ficha catalográfica es novela, y como diría el Bart:-Ay Caramba!, pero que fue aquello...
A ver si me explico: desde hace unos años a esta parte del siglo, la moda es salir a la pasarela editorial con lo ultimo que se nos ocurra, y la tónica, después del uso de palabras altisonantes de mal gusto, palabrotas de diario si se quiere, es llevar al lector por una serie de callejuelas idiomaticas mal pavimentadas, por las que arriesga uno quebrarse hasta la m...tratando de entender qué ocurre ahí
Arriesgando quedar ciega, o más loca, cualquier cosa podia pasar, llegué hasta bien adentro de esa ensalada con chile, aderezada con crema de ayote y yuca a la florentina sin saber si Venancio Iguanodonte, estaba escribiendo una cronica de lo ocurrido con dos perros muy finos propiedad de un indígena autóctono, o si era una denuncia contra las estructuras sociales de Ciudad-Pueblón
Entonces cerré el libro, porque ya mero tenía dolor de cabeza, cosa que creo sería el tamañito de la letra, que no ayudaba a la confusión general de las cosas
Y al uno, dos, tres lo volví a intentar, y ay nanita: para entrar en materia, según dice él, desde la primera pagina, y me refiero al indice, se nota a leguas que es una ocurrencia, ocurrente, mal llevada, escrita con enredos entre un titulo capitular y otro, y a lo Cantinflas, en el sentido del mal manejo de las ideas, porque el otro es un genio en el uso de la lengua, no permite que ni a tiros, con balas de cañón pa'no fallar, pueda uno saber de qué putas esta hablando
Forguet it, ni a palos voy a decir que aquello se me pareció un manualillo descontextualizado de la epoca de Calderón de la Barca, con visos trascendentalistas de más allá de Emily Dickinson, es más, a doña Em, como le decían sus amigos, sería la primera en reclamar el uso innecesario de tantos adverbios, adjetivos, artículos, palabras, verbos y demás, rumbo al infinito de la nada; y en encerrarse a fuego lodo, aunque creo que lo hizo, con tal de no saber nada de semejante desaguisado; aunque ya lo dije
No le entro al fut, pero creo que en barra Alfredo Cardona, Jrnaro Cardona, Adela Ferreto, Virginia Grutter, Fabian Dobles, Joaquin Gutierrez, Luisa González, Carlos Luis Saens, Carlos Luis Fallas, le quitaban la cancha para que se lleve a guardar la bola con todo y jugadores, y ojo, le fue muy bien, porque esos si eran capaces de hacer una quema y no necesariamente de la alcaldía; pues cada vez es más frecuente encontrar literatura tica que demuestra que es escribir es bien fácil, y que en materia de publicar lo ideal es tener uno, su propia editorial para publicar absolutamente el último ruido estomacal que se le ocurra
Y yo, yo, que públicamente siempre hice mofa sarcaz y sardónicamente, de Camilo Rodriguez Chaverri, por el asesinato impune y e inmisericorde de árboles para publicar sus libros, me encuentro con esto que parece el compendio de lo que no hay que hacer en materia de escribir un libro y de publicaciones menos. Gracias a Dios mi propuesta para que la comunidad ecológica del país, demandara a Rodriguez Chaverri, no prosperó porque ahorita mismo y de rodillas, se los juro, sobre granos de maíz, ensayando la cara pura y dulce de Sreekc, estaría pidiendo perdón, y de corazón,...
Recuperada de la impresión ya estaba yo haciendo comparaciones con lo leído, y las enseñanzas de Zúñiga cuando me di cuenta que el libro fue revisado por cinco personas, incluidas una que se dice ahora promotor y conocedor de la obra de Francisco Zúñiga Díaz
Whaaaaat?, ¿Y como no se acordó, por ningún lado, que ante semejante sambumbia, típico libro SIN (Argumento, sin unidad temática, sin ritmo, sin oído, sin desarrollo, diseño de trabajo, ni idea de comunicación, ni forma de entrar al juego literario) él hubiese dicho, tosesita, mi hijito eso necesita trabajo? Y cuando Chico decía eso, era volar pala, y eso lo sabe quien estuvo junto a él hasta el fin, y vio todas sus facetas
Horror de errores, o error de horrores, escojan la formula, bonita forma de ca...perdón, excretar sobre la imagen y el trabajo de alguien que sabía muy bien qué y cómo trabajar una novela absolutamente carente de todo lo que alguien con los años de experiencia de Arce, debería saber: no se escribe por casualidad, se tiene algo que decir y nuestro instinto nos dice como, y eso lo sabe hasta el innombrable Coehlo.
A eso, agreguemos que no escuchó lo que estaba escribiendo, pero sobre todo olvidó que un escritor debe asumir su arte como un trabajo, de hecho lo es, y aquello que nos gusta hacer, resulta ser que se hace con amor, con cariño y disciplina, y no mostrando una absoluta falta de sensatez política; no ensuciando el talento esperando que los votos del diputado lo salven a uno. esperando a que cuando se sea grande, hacer lo que se quiera con lo que se escribe, y que se debe exigir siempre un recuento de votos, aunque se oponga el diputado.
Lo anterior lo negativo.
El libro es un intento honesto por contar las vicisitudes de Venancio Iguano-Donte, en Ciudad-Puebón, solo que no-vio, de ahí la novela, por donde iba el asunto...
Solo el marco del espejo para este libro
Me queda un bonito papel de regalo, y el recuerdo de una amistad que, espero poder recuperar...

4 comentarios:

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  2. Yo creo que esta es una reseña con truco: hacer un arroz con mango que parece a chiste mal contado sobre un libro que bien puede ser un arroz con mango y chiste mal contado a la vez (si es que algo entendí, ojo), puede ser una invitación cómica a la lectura del libro en cuestión, un auténtico homenaje. Si es así, ambos son obras maestras.

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  3. "¿Venancio Iguano-Donte?" "¿Ciudad-Pueblón?" Eso habrá que leerse para creerlo.

    Gracias por una reseña, oscura, anfibológica hasta la madre y llena de muy pero muy buen humor.

    Por cierto, interesante eso de que Camilo Rodríguez sea candidato a ser acusado de vicio "contranatura", (en sentido ecológico, claro).

    Saludos, :)

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  4. Hace muchos años, frente al pelotón de fusilamiento... digo, allá por San Ramón, en un Primer Encuentro de Poetas Costarricenses,o algo por el estilo, en el cual finalmente no me digné leer en ninguna de las ocasiones, escuché a este señor que le decía a un grupo de señores y señoras algo mayores: "Vamos a hacer un pequeño grupo de poetas. Pero eso sí, solo gente selecta. Lo mejor de lo mejor". Mi carta de credibilidad es que esas frases no me las puede inventar, y se me han quedado como marca de fuego a través del tiempo.

    Saludos.

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